Los comentarios recurrentes destacan una demora significativa en las entregas, lo que sugiere problemas en la gestión del tiempo y posibles fallos en el proceso interno de trabajo. Las quejas no solo se centran en la lentitud para completar los encargos, sino también en la calidad del servicio ofrecido. Muchos clientes han expresado su insatisfacción con ajustes que no cumplen con lo solicitado inicialmente, lo que lleva a múltiples visitas de corrección sin garantizar la satisfacción.
Además, la comunicación entre Maribel Modas y sus clientes parece ser otro punto débil. Las revisiones indican una falta de claridad en la información sobre los servicios, precios y tiempos de entrega desde el inicio de la relación. Esta situación ha contribuido al descontento general, puesto que los clientes sienten que sus expectativas no se alinean con el resultado final.
En cuanto al trato al cliente, se percibe una necesidad de mejora. Se reporta un ambiente poco acogedor y una atención que a veces es percibida como distante o poco profesional, factores que, sumados a los problemas de servicio, culminan en una experiencia desfavorable para muchos.
Pese a la estratégica ubicación de Maribel Modas y la amplitud de su horario, que en teoría deberían jugar a su favor, el negocio enfrenta retos significativos en términos de calidad de servicio, manejo de expectativas y satisfacción del cliente. Los propietarios podrían considerar estos puntos críticos como áreas de oportunidad para mejorar y recuperar la confianza de su clientela.
CÓMO LLEGAR AHORA
LLAMAR: +34 977 21 35 83
Dirección: C/ de Cristòfor Colom, 33, 43001 Tarragona, España
Horario de Maribel Modas
Lunes:10a.m.-1:30p.m.,5-8:30p.m.martes:10a.m.-1:30p.m.,5-8:30p.m.miércoles:10a.m.-1:30p.m.,5-8:30p.m.jueves:10a.m.-1:30p.m.,5-8:30p.m.viernes:10a.m.-1:30p.m.,5-8:30p.m.sábado:10a.m.-1:30p.m.,5-8:30p.m.domingo:Cerrado
Opiniones de Maribel Modas
Mi reciente visita a Maribel Modas fue una experiencia que desafortunadamente tengo que narrar con pesar. Desde el momento en que crucé la puerta con mis dos hijos, buscando quizás un vestido nuevo, la atmósfera se tensó inexplicablemente. La persona que nos recibió, ya sea la dependienta o la dueña, no solo se mostró desinteresada, sino que nos incitó a salir, sugiriendo que regresara otro día y sola.
La manera como se dirigió a nosotros fue no solo despectiva sino también repulsiva, quedándose parada sin mostrar el más mínimo interés por atender. Calificaría su comportamiento como repugnante, algo que en estos tiempos resulta incomprensible y vergonzoso.
Intentar siquiera acercarme a los vestidos que exhibían se convirtió en una tarea imposible. La sensación era la de ser no deseada en el establecimiento, como si mi presencia allí fuera una molestia. Esta actitud altanera y maleducada nos dejó estupefactos, especialmente siendo esta experiencia en mi propia ciudad, lo cual agrega una capa extra de decepción.
La evaluación media de 1.6 sobre 5 que ostenta Maribel Modas no hace más que confirmar que mi experiencia no es aislada, sino parte de un patrón de comportamiento deplorable que parece ser la norma en este lugar. En retrospectiva, el consejo más valioso que puedo ofrecer es buscar otro establecimiento donde el trato al cliente sea prioritario y se valore el simple acto de mostrarse interesado y respetuoso hacia los visitantes.
La falta de cortesía y profesionalismo que enfrentamos en Maribel Modas es alarmante. Una experiencia que dista mucho de lo que uno esperaría de cualquier negocio, menos aún de uno dedicado a la moda y al servicio personalizado como debería ser un taller de costura. Mi recomendación es inequívoca: si buscas respeto, consideración y un servicio acorde a la expectativa de cualquier cliente, mejor busca en otro lugar.
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